JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR
PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA
PINTURA: OBRA DE AGOSTO DE 2020
“Figura femenina”
Óleo en cartón. 26 x 18 cm.1990.
ISAMAEL LOPERENA
Ismael Loperena nació en Arguedas, el 11 de julio de 1954.
Desde sus comienzos estuvo rodeado de pintura y de
escultura, dada la influencia de su padre Antonio Loperena.
Su vocación práctica y profesional no se dio hasta 1979,
donde comenzó a estudiar BBAA en Bilbao. Antes se había
licenciado en magisterio, por lo tanto, es maestro y pintor.
Después de Bilbao, en 1983 fue a Venezuela, en donde residió
tres años. Allí comenzó a tomarse en serie el mundo del
arte, en el día a día, gozando y sufriendo con la pintura.
Tras ello recorrió diversos lugares de España y Francia para
regresar a la Ribera de Navarra y asentarse definitivamente
en Fontellas, muy cerca de su querida Tudela. Y ahí sigue,
pincelada a pincelada y verso a verso…decorando paredes del
mundo, creando y recreando, dando vida a los objetos de su
entorno a través del arte…viviendo diariamente la amada
soledad del taller, la bella y deseada monotonía que aporta
su oficio. A lo largo de su ya larga trayectoria estética ha
demostrado ser un artista enormemente polifacético,
practicando el arte en diferentes vertientes y sabiendo
transformar objetos de uso cotidiano en auténticas
expresiones de arte.
La obra que presentamos se conserva en colección privada de
Navarra. Si es complejo analizar la escultura de este autor,
más complejo resulta intentar sistematizar otro tipo de
realizaciones, como puede ser la propia pintura. Se trata de
un artista que ha trabajado mucho la pintura, como también
hiciera su padre Antonio Loperena. La gran dificultad
consiste intentar sistematizar su producción ya que se trata
de un hombre multidisciplinar y capaz de tocar todos los
estilos y maneras posibles; su obra oscila habitualmente
desde realizaciones paisajísticas encuadradas en estéticas
muy tradicionales, a otras formas mucho más avanzadas, que
podemos encuadrar en estéticas expresionistas o cubistas. Se
mueve cómodo desde la figuración a la abstracción, y todo
ello dentro del ingenio que caracteriza a este creador
navarro. En la obra que ahora presentamos se hace evidente
esas características, al presentarnos esta figura femenina,
tratada a caballo entre el expresionismo, el cubismo o el
propio fauvismo. En todo caso, resulta evidente que estamos
ante una realización de carácter y personalidad, como es, en
definitiva, la producción de Ismael Loperena. |