JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR

   PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA

 

PINTURA: OBRA DE MARZO DE 2020

 

 

“Bodegón con jarro y pan”
Óleo / lienzo. Medidas: 46 x 55 cm.
ARAUJO, Luis


Luis Araujo Martínez fue un pintor, dibujante y retratista pamplonés nacido en 1932 en la Plaza de San José. Su vocación artística es temprana formándose durante la década de los cincuenta en la Escuela de Artes y Oficios de la ciudad con los maestros Luis Andreu y Gerardo Sacristán. En dicha escuela obtuvo grandes progresos y algún que otro premio, como es el caso del Premio Paulino Caballero en modelado por un busto titulado “David”. Por esta época amplia también sus estudios en la academia de Javier Ciga, donde permanece durante dos años. Por los avatares de la vida su labor profesional le llevó a la función pública, trabajando muchos años en Correos. De esta manera, en la década de los sesenta abandona toda actividad pictórica, hasta que reanuda el trabajo con los pinceles en 1972. Estuvo casado con María Teresa Barón, estableciendo el domicilio familiar en el pamplonés Barrio de la Chantrea. Fruto de dicho matrimonio son sus cuatro hijos, Juan Luis, Patxi (que ha seguido los pasos artísticos de su padre, siendo profesor de Bellas Artes en la Universidad del País Vasco), Mª del Puy y Nerea. El artista falleció el 17 de septiembre de 2009, cuando se encontraba a punto de inaugurar una exposición individual en los salones del Nuevo Casino de Pamplona.

La obra que presentamos se conserva en importante colección pictórica de arte navarro Tudela. La obra artística de Luis Araujo, siempre apegada a modelos figurativos, trabaja esencialmente el óleo y el dibujo, tanto a la sanguina como al carboncillo. Dentro de su relativamente extensa producción destacan tres temas por encima de los demás, el retrato, el bodegón y el paisaje. Respecto del bodegón fue siempre un género muy querido y repetido para el artista y en lo cual se esmeró en extremo. En sus bodegones la obsesión principal era reflejar las calidades de los distintos materiales de los objetos que representaba. Procuraba estudiar las composiciones con gran esmero, buscando la visibilidad y el equilibro de las masas. En general, los resultados obtenidos en este tipo de obras son de muy buen nivel estético, seguramente de lo mejor dentro de la producción del artista. Suele tratarse de obras de ejecución virtuosa, que demuestran conocimiento de la materia y dominio técnico, con luces, contrastes y efectos meritorios, combinando objetos materiales, como bronces o cerámicas, con otros elementos procedentes de la propia naturaleza. La obra que traemos a estas líneas sigue esos derroteros estéticos.