JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR

   PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA

 

PINTURA: OBRA DE JULIO DE 2018

“Paisaje”
Óleo en tela. 30 x 50 cm. c. 1900
LARRAGA, Andrés.

Andrés Larraga Montaner nace en Valtierra, el 4 de febrero de 1861, en la calle San José, donde residía la familia y donde también nacieron sus hermanos. Fue hijo de Don Norberto Larraga y Doña Eufemia Montaner, ambos naturales y vecinos de la localidad. Larraga nació en una Navarra donde la mayor parte de la población era campesina, no existiendo gran interés por las artes en general. Por tal motivo, Andrés Larraga se desplazó a Barcelona, donde inició los estudios artísticos como discípulo de Josep Armet, destacado paisajista barcelonés. En 1886, Andrés Larraga llega a París, donde conoce el impresionismo. No se sabe exactamente el tiempo que estuvo Larraga en París, aunque si alternó sus viajes con retornos a Barcelona, donde en diciembre de 1887 participaba en su primera exposición colectiva organizada por la Sala Parés. En 1900 viaja por el norte de Navarra y por Guipúzcoa; sus lienzos evocan paisajes de costa y de interior. Establecido en Barcelona, fue reputado paisajista dentro del ambiente artístico catalán. Viajó mucho por Europa y norte de África. Aparte del óleo practicó asiduamente la acuarela. En 1931 fallecía en Barcelona, después de una vida íntegramente dedicada, con pasión, al mundo de la pintura, consecuente con una búsqueda personal del arte, alejado conscientemente de las nuevas vanguardias.

El cuadro que presentamos en este momento pertenece a reputada colección de arte localizada en Pamplona. El artista de Valtierra practicó el óleo, la acuarela, donde se constituyó en un reputado maestro) y la pintura en otros soportes, como la cerámica. Dentro de la técnica del óleo lo básico es su dedicación al paisaje, aunque no rehuyó la pintura de figuras, recordándose sobre todo sus conocidos cuadros de gitanas. Dentro del paisaje, su obra se inscribe dentro de la escuela catalana o levantina, con una pintura tanto de escenas marítimas, de costa, fluviales como otras que plasman paisajes del interior rural. Sintió especial predilección por las escenas costeras, de playas, con horizontes alejados y con un gusto decorativo heredero del impresionismo, el realismo e incluso el romanticismo. La obra que traemos a estas líneas en cuestión es un paisaje muy típico del autor, con una representación rural bastante indeterminada, centrando la composición unos árboles, con unas pobres casas a su izquierda. Los estudios del cielo y sus nubes tienen importancia dentro de esta obra, como sucede habitualmente en la producción del artista.