JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR

   PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA

 

PINTURA: OBRA DE MARZO DE 2017

 

“URRASUN DE AZPILICUETA (NAVARRA)”
Óleo / lienzo. Medidas: 33 x 41 cm. c. 1920-25.
GARCÍA EZPELETA, Rafael.


Rafael García Ezpeleta nace en Pamplona, el 24 de octubre de 1895, hijo de Venancio García y Escolástica Ezpeleta. Procede de familia humilde de jornaleros. Dada su vocación artística cursó estudios en la Escuela de Artes y Oficios de Pamplona de 1909 a 1914, con buenas calificaciones y bajo magisterio de Enrique Zubiri. En 1915 solicita ayuda económica a la DFN para estudiar BBAA en Madrid, cosa que se desestima. Pudo gozar de la pensión más tarde, tanto de la DFN como del Ayuntamiento de Pamplona, lo que le permitió cursar estudios en Madrid entre 1919 y 1923. Posteriormente solicitó una ampliación de beca para estudiar en el extranjero, asunto
que le fue denegado. En la exposición colectiva de 1917, en las escuelas de San Francisco de Pamplona, presentó un paisaje. En los años veinte su nombre aún figura en exposiciones colectivas en Pamplona. No obstante su figura va desapareciendo paulatinamente del panorama artístico navarro. Por algunos datos que tenemos parece que posteriormente se dedicó a la fotografía. Desconocemos la fecha de su fallecimiento.

El cuadro que presentamos a continuación se conserva en importante colección de arte navarro, localizada en Pamplona. Se trata de un típico paisaje del norte de Navarra, concretamente de un pueblo del Valle de Baztán. Presenta la característica vista de las recias casas del país, alineadas, con una calle delante y una meta de heno en la parte derecha de la composición. Estamos ante una obra heredera sin duda del paisajismo tradicional navarro de la primera mitad del siglo XX, ejecutada en la estela de los paisajes que realizaban los grandes maestros de la pintura navarra de la época, Jesús Basiano y Javier Ciga. El cuadro goza de una buena y acertada entonación y
combinación de gama de colores; no obstante, su dibujo y composición resultan un tanto forzados, mostrando seguramente las limitaciones que presentaba este artista. En definitiva, estamos ante una obra que demuestra el tipo de pintura de paisaje que se realizaba en Navarra durante el primer tercio del siglo XX, por parte de artistas que podemos catalogar como secundarios dentro de nuestro panorama estético y que no lograron hacerse un hueco dentro del mismo.