JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR

ESCULTURA: OBRA DE JUNIO DE 2017

“Contraste”
Madera tallada. 120 cm. altura.
ARDAIZ, Koke

Koke Ardaiz nació en Obanos en 1943, en la casa Mutikoandia. Desde muy joven empezó a tallar madera y más tarde acudió a la Escuela de Artes y Oficios Artísticos de Pamplona. En la misma, trabajó el dibujo con Salvador Beunza y la pintura con Jose Mª Ascunce. Como compañeros coincidió con Ernesto Murillo, Pedro Azqueta, Isabel Peralta, Ángel Garraza, Valle Fernandez…También ha trabajado la forja en el taller de Brun y la talla en piedra en la Escuela de Artes y Oficios de León. Ha seguido todas las técnicas quedándose definitivamente con la escultura en madera que es, según afirma, donde mejor se siente. En la actualidad se le puede encontrar en el Taller-Exposición de Puente la Reina; también dando clases a alumnos que se interesan en la técnica de la madera en Obanos y Mendigorría. Amante de la cultura y tradiciones populares, con un conocimiento profundo de aquello que le rodea, desea dar a conocer y potenciar toda manifestación artística y provocar su creación partiendo de una idea, de una inquietud. Desde sus primeras exposiciones individuales en 1972 en Estella, Sangüesa y Tafalla, ha presentado sus obras en Pamplona, San Sebastián, Burlada, Zizur Mayor, Berriozar, Etxarri-Aranatz o Puente la Reina, entre otras localidades. También ha participado en numerosas muestras colectivas desde la primera de 1966.

La obra que presentamos se conserva en colección particular. Los temas que trata Koke Ardaiz son los mismos temas que le rodean en su mundo, plasmando los temas de actualidad a su manera. Le gusta recrear, de manera prioritaria, escenas de viejas costumbres que no quiere que se pierdan de ninguna manera. Así, podemos encontrarnos con un hermanamiento entre Puente la Reina y Obanos, el Tributo de las Tres Vacas está presente en varias piezas, y también destacan los coros de Santa Agueda, el tradicional baile de Lesaka a las orillas del río Onin, la ronda con Olentzero u otras tradiciones relegadas a exhibiciones como el oficio de los almadieros o los pimentoneros. Koké Ardaiz trabaja en sus esculturas mayoritariamente utilizando la madera, sus obras están realizadas y talladas con maderas como el cerezo, el nogal, el olmo, el pino y el roble. Las texturas, claroscuros, volúmenes, el artista tiene una particular forma de la belleza y la pureza y sobre la búsqueda de las mismas, entroncando con una escultura de inspiración autóctona, primitivista, de líneas puras. En la obra escultórica que presentamos aquí se confrontan dos figuras en diálogo, una femenina y otra masculina, desnuda y tapándose con una manta. El conjunto se entronca dentro de la estatuaria habitual del autor, con figuras ejecutadas sin detalle, a base de masas y con ese tono entre lo primitivo y esencial que siempre le caracteriza.