PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA |
ESCULTURA. OBRA DEL MES DE JUNIO DE 2021 |
Bronce. 36 x 21 x 20 cm. 1978 CASTUERA, Mª Cruz. |
María Cruz Castuera Salvatierra nació en Pamplona el año 1933. Tras sus estudios aprendió conocimientos artísticos en la escuela de
Artes y Oficios de la capital navarra, interesándose preferentemente por la escultura. Su hermana, llamada María Isabel Castuera,
compartió su afición por las Bellas Artes, trabajando en este caso el dibujo y la pintura. La carrera de Mª Cruz Castuera se desarrolla
preferentemente entre los años sesenta y los años ochenta. Residió en la calle Aralar de Pamplona, donde tenía su estudio artístico;
en algunos momentos se dedicó a la docencia particular del arte. A pesar de su dedicación a la escultura durante muchos años,
trabajó en otras disciplinas profesionales, siendo oficial del registro de la propiedad de Pamplona. Permaneció soltera,
residiendo la última etapa de su vida en la casa de Misericordia de Pamplona. Tuvo una actividad expositiva relativamente notable,
haciéndolo de manera individual en marzo de 1968 y mayo de 1978 en la Sala de García Castañón de la CAMP, y el año 1971 en la
Sala Conde Rodezno de la CAMP, siempre conjuntamente con su hermana Isabel.
La presente obra se conserva en importante colección de arte navarro localizada en Pamplona. Se conserva de la misma la obra original, ejecutada en arcilla policromada y una copia única en bronce. Esta escultura es un buen reflejo de lo que suponía la producción escultórica de María Cruz Castuera, dedicada preferentemente al retrato, ejecutado en arcilla, con estudios fisonómicos muy bien conseguidos y básicamente de tipo busto. Estas cualidades hicieron que la autora gozara de bastante predicamento en los años sesenta y setenta, obteniendo numerosos encargos de particulares. Castuera trabajó, como bien observamos, una escultura en tono figurativo, buscando la semejanza física con el retratado y utilizando una gran capacitación técnica, con un tono siempre amable. Cuando se habla de la autora, se recuerda habitualmente un retrato que le realizó al pintor Gerardo Sacristán, maestro de la Escuela de Artes y Oficios de Pamplona. |