JOSÉ MARÍA MURUZÁBAL DEL SOLAR
PINTURA Y ESCULTURA NAVARRA
ESCULTURA: OBRA DE DICIEMBRE DE 2020
“Sin título”
Madera, cartón y cristal. 33 x 34 x
42 cm. 2013.
BADOS, Ángel
Ángel
Bados (Olazagutia 1945). Entre 1969 y 1973 estudia BBAA en San
Fernando de Madrid, donde se licencia en la especialidad de
escultura. Ha sido profesor en la Escuela de Artes de
Pamplona. A su llegada a Bilbao se produce el encuentro con un
grupo de artistas (Txomin Badiola, Juan Luis Moraza, Marisa
Fernández y Pello Irazu) que, compartiendo una serie de
sensaciones, presentimientos y conceptos, configuran el grupo
de artistas renovadores en la escultura de los años 80. Su
trabajo escultórico ha estado siempre muy conectado con su
vocación docente desarrollada en la Facultad de Bellas Artes
de Bilbao. Y es precisamente en este campo, donde Ángel ha
destacado como figura esencial para varias generaciones de
artistas, especialmente en los años que junto a Txomin Badiola
estuvo al frente de los cursos de escultura de ARTELEKU
(1994-1998). El año 2008 publicó "Oteiza. Laboratorio
experimental." un trabajo que sirvió para organizar y
catalogar el trabajo de laboratorio del escultor Jorge Oteiza,
junto al citado libro comisarió una exposición en la Fundación
Museo Oteiza. Su obra forma parte de las colecciones de la
Fundación la Caixa, Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona
(MACBA), Fundación Juan March, Fundación ICO, Comunidad de
Madrid, Museo de Navarra, Fundación ARCO, Museo Reina Sofía o
Museo de Bellas Artes de Bilbao. En 2018 recibió el premio
nacional de Artes Plásticas.
La
escultura que comentamos se conserva en colección privada. Es
una magnífica muestra del quehacer escultórico del artista
navarro Ángel Bados, encuadrado dentro de una escultura de
maneras conceptuales. El propio artista ha defendido en todo
momento la producción escultórica como un «artefacto
transformador», que necesariamente se relaciona con el espacio
que ocupa e interviene en la vida. Estamos ante un artista que
siempre ha sabido compaginar en su obra elementos de lo
cotidiano, elementos normales de la vida de cualquier persona,
creando a través de ellos obras escultóricas sencillas de
estructuras, pero profundamente interrogativas para el
espectador. La obra que ahora traemos a estas páginas se
construye con estas características aquí comentadas, compuesta
por elementos como repetimos sencillos, de la vida cotidiana y
ordinaria, a base de cartón, maderas y un elemento decorativo
en cristal. Todo ello dotado, eso sí, de un gran sentido
colorista y vitalista, con ese afán de llegar al espectador y
sorprenderlo. |